La generación de los 70´s, tuvo el privilegio de tener su propio Far West Town en lo que hoy se conoce como Quinchamalí en la Av. Las Condes, aquí los trips estaban a la orden del día, Oranges, trasparentes, pink, hasta un poco de colapis corría por el lugar....
Los fines de semana era una alternativa muy buena para pasar un entretenido rato con amigos o la familia, existía una media luna en la cual con unos copetes de más, te atrevías a montar algún caballo medio chúcaro, en una ocasión, envalentado por unos cuantos piscolas subí a una mula, inteligente animal, apenas le sacaron el saco que tenia puesto en la cabeza, se fue con todo hacia los bordes de madera con la sola idea de azotarme contra esta, después de unos brincos y unos cuantos saltos.....termine en el suelo, lleno de moretones, pero feliz....